En Roma, Italia

Hoy quiero compartirte un Rincón en Roma, Italia, tratando de unirme mentalmente al pueblo italiano desde la distancia y con todo mi corazón... Hoy te digo del "Antico Caffè Greco".

Lo descubrí por casualidad, luego me fui enterando de su historia.......”Casualidad” habla mucho de mi manera particular de viajar: me encanta llevarla conmigo como compañera de viaje, junto a su hermana “Soledad”. De vez en cuando les suelto el timón de mis pasos, y en general las sigo ciegamente: Me han dado hermosos y singulares resultados, como El Greco.

Caminaba yo por las encantadoras, caminables y adictivas calles de Roma, cuando percibí el olor, tan usual en todo el país, a café...Busqué con el olfato la causa, “Casualidad” me señaló el lugar de procedencia y entré.

Ya dentro del lugar, y sentada en una de sus delicadas y antiguas mesitas, disfrutando de un café cappuccino, reparo en un señor de unos 70 años que dibujaba, y de vez en cuando me miraba...Yo nunca me he distinguido por la timidez, así que me levanté de mi asiento y me acerqué:
-"¿Puedo mirar?" le pregunto,
-"Seguro signorina!" responde el simpático señor

Miro detalladamente la obra, y me descubro en el dibujo hecho a mano alzada:
-"¡Ah, pero estoy en el dibujo!" le digo divertida
-"¡Si, es bellisima!" responde sonriente

Se me enciende un bombillo:
-"¡Pues debería pagarme: fui su modelo!" le digo soltando una carcajada




Ese fue el inicio de una larga, simpática y entretenida conversación con aquel artista del dibujo, que vendía sus cuadros a los clientes del establecimiento...Nunca me pagó,  ni tampoco me regaló el cuadro (mi segunda propuesta). Pero haber entablado esa conversación con este singular personaje, lleno de anécdotas e historias sobre Roma, los turistas y el Café El Greco; dio paso a que conociera al segundo personaje de mi relato sobre El Greco...

Antes de seguir la historia, te hablaré brevemente sobre el lugar: Está ubicado en el numero 86 de la Vía Condotti, Roma. Fue fundado en el 1760, y es el segundo café más antiguo de Italia, precedido solo por el Caffè Florian de Venecia. Sus paredes están decoradas con pinturas y tapices antiquísimos,  que te recuerdan sus inicios. La música acompaña la experiencia perfectamente....En pocas palabras, un lugar que no se puede quedar en tu lista cuando visites Roma...De más está decirte que encontrarás todo tipo de cafés, tés, chocolates, bocadillos y productos de pasticceria italiana. El servicio es clásico y elegante, pero con su toque del desenfado italiano.

Ahora vamonos con el segundo personaje del que te hablé: Entra el Gerente del Antico Caffe Greco en escena...Se une a la amena conversación que tenía con el veterano dibujante: Me reitera lo "Bellisima" que era (algo que me encanta de los italianos: No son vergonzosos a la hora de expresar sus sentimientos) y con su encanto de “Romeo italiano”, me invita a una actividad privada que iba a iniciar en ese momento en uno de los salones de actividades del lugar. Yo, ante la insistencia de mi amiga "Casualidad", secundada por su hermana "Soledad", acepté: ¡Total, Roma podía esperar!

Describirte en pocas palabras la experiencia que viví será difícil: Solo puedo decirte que ha sido una de las más entrañables, sublimes e inolvidables de las experiencias que he vivido junto a mis amigas "Soledad' y "Casualidad”; solo acompañada por ellas hubiese podido sumergirme como lo hice en la actividad a la que había sido invitada.

Era un duelo entre un poeta y una pianista: ¡Sí, un duelo!...El poeta atacaba a la pianista con unos versos, inspirados en el momento (lo sé, porque uno de ellos fue inspirado por mis ojos, mientras el poeta se acercaba a mi recitándolo); la pianista a su vez, respondía tecleando majestuosamente en un hermoso piano de cola ubicado en el centro del salón!. Aquello ocurrió por espacio de hora y media; pero pareció un soplo, un sueño fugaz: ¡Fue magnífico!

Hace poco leí que querían desalojar de su local al Antico Caffe Greco, cosa que, precisamente, el mundo de la cultura y de las artes italianas no permitieron...Hoy, junto a ti, quiero imaginarme caminando por las calles de Roma, regresando a este histórico Rincón, que espero perdure en el tiempo por muchos, muchos años más...

¡Te pienso Italia!

Lissette