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Viajar sola



Mañana es 8 de marzo, y creo que es una buena ocasión para motivar a las mujeres que me leen  a viajar en solitario.


Aunque sea una vez en tu vida deberías experimentar un viaje contigo como única compañía…Tú, contigo, montarte en un avión, tren, barco o autobús y perderte por los mundos de Dios.


Al viajar en solitario te descubrirás, te conocerás más íntimamente, te reconocerás; además de que te aseguro crecerás como persona.


Te descubrirás y conocerás más íntimamente porque andarás alerta a lo qué pasa a tu alrededor, y cómo esas cosas que pasan te afectan…Estarás a cargo de ti, deberás cuidarte a ti y a tus pertenecías….Aplastarás el miedo a lo desconocido, al silencio, a entablar conversaciones con extraños y contigo. Y sobre todo, tratarás de añoñarte y hacerte feliz, a ti misma.


Te reconocerás y desarrollarás tus instintos….Cuando te sientas incómoda o en peligro lo sabrás. Cuando estés cansada, te detendrás a descansar. Cuando te asombres por un paisaje o por un sabor lo apreciarás más íntimamente y cuando alcances una meta, tú misma te abrazaras y darás palmaditas en el hombro. Te tomarás tu propio tiempo en cada lugar…Cuando te quieras quedar te quedarás mas tiempo y cuando sientas que te debes marchar lo harás.



Ya he dicho en ocasiones anteriores que viajar en solitario es mi manera de viajar, eso me ha facilitado viajar de oído, del disfrutar de dolce far niente, y me ha formado como la mujer que soy hoy en día.


Sensaciones como entrar a un restaurante o bar sola; adentrarte en un bosque o montaña y pasarte el día entero sola, caminando y escuchando los sonidos de la naturaleza; pasarte un día frente al mar disfrutando del vaivén de las olas y de tus pies hundidos en la arena; perderte entre las calles de una ciudad y asombrarte de los hallazgos en el camino (un espectáculo callejero, una maravilla arquitectónica o un restaurante escondido). 



Aprender nuevas palabras en otro idioma, aprender cómo funcionan las cosas en otros países y culturas. Descifrar aeropuertos, estaciones de trenes, de autobuses y puertos.

Andar con todos los sentidos al cien por ciento para no perderte, para estar consciente de lo que pasa a tu alrededor. Hacer nuevas amistades, ser más espontánea, más relajada….Estos son solo algunos ejemplos de los regalos que te deja el viajar sola, tú a cargo de ti y de tus planes.

LISSETTE

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